Muchas veces se ha pensado que la música y la moda son musas separadas: una inspirando discos y la otra elevando las “primeras impresiones”. Pero si algo hemos aprendido durante los conciertos que han pasado por la Ciudad de México es que nada es al azar y que solo ciertas celebrities logran unir estas dos ramas en un ecosistema limpio, reconocible y con narrativa propia.

Pasó con Lana Del Rey en 2023, pasa cada año en el Electric Daisy Carnival, con Oasis en aquel Britpop summer donde los Adidas Samba eran prácticamente uniforme, y hasta con Taylor Swift, cuya llegada a México convirtió Midnights en un código de color. Nadie se quedó afuera del dress code que cada evento masivo imponía —o proponía— en el país.

Entre guiños rave, un futurismo que coquetea con la alta moda y una imp

See Full Page