En muchas comunidades, los cubanos dependen más de remedios caseros y el apoyo vecinal que del sistema de salud formal, afectado por la escasez de personal y recursos. La mortalidad podría elevarse, especialmente entre niños, ancianos y personas con enfermedades crónicas

Cuba atraviesa una crisis epidemiológica que supera cualquier referencia reciente. El Ministerio de Salud Pública (MINSAP) reconoció públicamente que no tiene bajo control los brotes de chikunguña y dengue , una admisión inusual en un sistema que rara vez expone sus debilidades internas.

Según los datos oficiales más recientes, 43.911 personas presentan síndrome febril inespecífico , categoría que agrupa a los casos sospechosos. De ellos, 37.197 han sido confirmados con chikunguña ,

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