Compartir fotos, documentos o vídeos entre dispositivos de distintas marcas se ha convertido en una necesidad cotidiana para muchos usuarios. Hasta hace poco, este proceso requería aplicaciones externas, cables o servicios en la nube, lo que podía complicar la transferencia y hacerla menos segura. La aparición de funciones que permiten la transmisión directa de información ha simplificado notablemente esta tarea, haciendo que el intercambio sea más rápido, confiable y accesible para todos.
En los últimos meses, la compatibilidad entre Android y Apple ha dado un paso importante. Gracias a la integración de tecnologías como Quick Share y la adaptación de AirDrop a estándares más abiertos, ahora es posible enviar y recibir archivos entre equipos sin depender de soluciones externas. Este avance no solo mejora la experiencia de uso, sino que también demuestra cómo decisiones tecnológicas y regulaciones pueden influir directamente en la forma en que los usuarios gestionan su información diaria.
Cómo funciona el sistema AirDrop en Android
Esta función permite que móviles Android envíen y reciban información desde equipos Apple sin necesidad de instalar aplicaciones adicionales. La base del procedimiento se encuentra en Quick Share, la herramienta de Google, que ahora puede conectarse con la funcionalidad AirDrop presente en los iPhone, iPad y Mac.
Compartir contenido entre un terminal Android y un iPhone es un proceso sencillo, siempre que ambos estén correctamente configurados. En el equipo de Apple que recibirá los datos, es necesario activar AirDrop y asegurarse de que sea visible. Por seguridad, se recomienda limitar la recepción a un periodo de tiempo específico, como “Todos durante 10 minutos”, o restringirla únicamente a “Contactos”, reduciendo así posibles accesos no deseados.
Desde el móvil Android que enviará la información, el usuario debe localizar el documento, vídeo o imagen que desea transferir y pulsar la opción “Compartir”. Entre las alternativas disponibles, se selecciona Quick Share. En ese momento, el equipo receptor aparecerá en la lista de proximidad y, tras seleccionarlo, la comunicación se inicia. El usuario del iPhone debe aceptar la recepción desde la notificación correspondiente. Una vez completado el envío, los datos se guardan automáticamente en la ubicación predeterminada del sistema, listos para acceder de inmediato.
El proceso funciona de manera similar en sentido inverso, desde un iPhone hacia un terminal Android. Primero, el equipo Android que actuará como receptor abre Quick Share y se mantiene visible, listo para recibir la información. Desde el iPhone, se selecciona el contenido y se pulsa el icono de compartir. En AirDrop se elige el terminal de Android y la transferencia comienza. La llegada del contenido se indica en la sección “Compartiendo conmigo” de Quick Share, donde el usuario acepta la descarga, que queda almacenada en la carpeta de destino del terminal.
Por ahora, solo ciertos modelos de Pixel y algunos otros móviles seleccionados pueden aprovechar esta funcionalidad. Con el tiempo, se espera que más equipos se sumen a la compatibilidad, ampliando el grupo de usuarios que pueden intercambiar información directamente entre sistemas. Esta solución facilita la gestión de documentos, imágenes y vídeos entre sistemas operativos distintos sin depender de aplicaciones externas ni servicios en la nube.
El papel de la UE en la compatibilidad entre dispositivos
A comienzos de 2025, la Unión Europea estableció normas que buscaban mejorar la comunicación entre dispositivos móviles, incluso si eran de marcas diferentes. Esto supuso un cambio relevante para Apple, cuya función AirDrop hasta entonces dependía de un sistema exclusivo que solo funcionaba dentro de su ecosistema. Con la nueva regulación, la compañía tuvo que adaptar sus equipos para que la transferencia de archivos fuera más abierta y compatible con otros sistemas.
Para cumplir con estas exigencias, los iPhone comenzaron a incorporar el estándar Wi-Fi Aware, un protocolo que permite la conexión directa entre distintos equipos. Aunque Apple había participado en el desarrollo de esta tecnología, su adopción se volvió obligatoria.
Esta medida recuerda lo que ocurrió con el puerto Lightning, reemplazado por USB-C siguiendo políticas de estandarización europeas, de manera que cargadores y accesorios se hicieron compatibles entre distintas marcas. De forma similar, wifi Aware permite que los dispositivos Apple se comuniquen con terminales Android sin depender de adaptadores o aplicaciones externas.

ElDiario.es
The Conversation
IMDb TV
DoYouRemember?
The Scioto Post
Real Simple Home