El Gobierno argentino está considerando modificaciones a la reforma electoral existente, con la vista puesta en las elecciones de 2027. Esta reforma, diseñada por el asesor presidencial Santiago Caputo, fue presentada al Congreso Nacional en noviembre de 2024. Según una fuente cercana, se está analizando la posibilidad de sancionar varios aspectos del proyecto durante 2026, un año sin elecciones, lo que permitiría avanzar en cambios pendientes en el sistema electoral.

Uno de los principales puntos en discusión es la implementación de la Boleta Única de Papel (BUP) en las 23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La intención es que esta nueva modalidad se aplique tanto a elecciones nacionales como provinciales. Un miembro del sector libertario argumentó: “No hay coincidencia en los sistemas electorales. Nosotros apuntamos a simplificarlos y a unificar los procesos para no complicarle la vida a la gente”. Actualmente, provincias como Córdoba, Mendoza y Santa Fe ya utilizan la BUP, lo que genera expectativas en la líder de La Libertad Avanza, Karina Milei, para extender su uso a nivel nacional.

Además, se está considerando añadir un nuevo casillero en la papeleta actual que permita a los votantes seleccionar la lista completa, evitando así posibles descuidos en la elección por categorías. Sin embargo, desde Casa Rosada son conscientes de que estas modificaciones encontrarán resistencia por parte de los gobiernos locales, por lo que planean llevar a cabo un debate público sobre el tema.

Otro cambio propuesto se refiere al mecanismo de elección de los Parlamentarios del Mercosur. Actualmente, este sistema es mixto, pero se plantea que pase a ser indirecto, donde los legisladores decidirán según la representación de cada espacio. Para implementar este cambio, será necesario modificar la Ley 27.120, eliminando el sistema actual y derogando la elección directa por voto universal.

Asimismo, se prevén modificaciones en el régimen de partidos políticos, un tema que ha sido una prioridad para el ex jefe de Gabinete Guillermo Francos. El objetivo es “mejorar la calidad institucional”, lo que implicaría una revisión del sistema de financiamiento de los partidos para optimizar los costos de las campañas.

El proyecto de Reforma para el Fortalecimiento Electoral, que no prosperó en su tratamiento legislativo, incluía propuestas como el aumento de los topes de aportes privados, la eliminación de espacios de publicidad electoral obligatorios en los medios, y la reducción del tiempo de encuestas previas a las elecciones.

En cuanto a las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), la administración libertaria está debatiendo su posible eliminación. Manuel Adorni, vocero presidencial, había señalado que “desde su creación las PASO han funcionado como una encuesta millonaria al servicio sólo de la política y en detrimento de la economía y el tiempo de los argentinos”. La discusión sobre este tema es parte de los planes del Gobierno de cara a las elecciones de 2027.