Hace unos meses, el fallo del juzgado mercantil número 2 de Barcelona, que desestimó la demanda de Just Eat contra Glovo por competencia desleal, provocó la indignación del pensamiento único. Yolanda Díaz manifestó su inquietud por «la Justicia radicalizada», aludiendo a Álvaro Lobato, que, según El País , es un «juez que cuela doctrina económica en los fallos», que según sus colegas es «un ultraliberal de formación muy estadounidense y un poco provocador», y que, en palabras de eldiario.es «difunde ideología antisindical».
El esfuerzo retórico en la descalificación me animó a revisar los argumentos del juez, que no solo concluyó que Glovo actuó dentro de la legalidad con su modelo de los (mal) llamados «falsos autónomos», sino que planteó la tesis muy radical, provocadora y extremist

La Razón

Plaza de Armas
Noticias de México
Latinus
CBS News
Screen Rant
VICE
America News
The Daily Beast
Major League Soccer