• Este futbol, el nuestro, el mexicano es retroceso, es mera ambición económica.

#PrimeraNETA: Se enamoran de la narrativa, pero le huyen a la realidad. Y allá van buena parte de opinadores, analistas y aficionados, como abejas a la miel después de conocer a los rivales de la ratoniza verde en el próximo Mundial de 2026: “Qué buena fortuna tuvimos en el sorteo”, “le dejaron planito el camino a Aguirre”, “un gran golpe de suerte”, y en eso se queda la mayoría: en el análisis del historial de México contra surcoreanos en competencias mundialistas y les resulta fácil opinar que si ya se han enfrentado dos veces y en las dos ganó México, pues la tercera deberá de ser igual. Se festeja el sorteo como una suerte de sentirse seguros, de alejarse del sentimiento fatalista, de no querer ver la muy

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