La historia de Clelin Ferrell es de esas que te recuerdan que el futbol americano está hecho de segundas oportunidades, carácter y hombres que se rehúsan a dejar que otros definan su techo. De joven aprendió que la adversidad puede moldearte o romperte.

La pérdida de su padre marcó su vida, pero también le encendió una chispa que lo ha acompañado en cada etapa: la convicción de que el esfuerzo diario puede transformar cualquier destino.

En Clemson se convirtió en un líder natural, un jugador que imponía respeto sin necesidad de levantar la voz. Ahí se forjó el cimiento de un competidor feroz, responsable y absolutamente comprometido con el equipo.

Ese espíritu lo llevó a la NFL bajo enormes reflectores, expectativas y, eventualmente, críticas. Pero Ferrell nunca ha sido de los que se es

See Full Page