“Me decepciona un poco que el presidente Zelenski aún no haya leído la propuesta”. Así se ha expresado este domingo el presidente de EEUU, Donald Trump, a su llegada al Kennedy Center para una entrega de premios. “Eso era hace unas horas”, ha dicho Trump: “A su gente le encanta, pero él no. A Rusia le parece bien. Rusia supongo que preferiría quedarse con todo el país. Pero creo que a Rusia le parece bien. Sin embargo, no estoy seguro de que a Zelenski le parezca bien. A su gente le encanta. Pero él no la ha leído”.

El plan establece la cesión de Donbás a Rusia, un límite militar de 600.000 soldados para el Ejército ucraniano y la neutralidad –que no entre en la OTAN–, mientras que Moscú dice que, si se rechaza, tomará el control del campo de batalla.

Por contra, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha expresado el buen recibimiento de la estrategia de política exterior y de seguridad nacional Trump: “El actual Gobierno difiere radicalmente de los anteriores y, por supuesto, el presidente Trump ahora es fuerte en términos de posiciones políticas internas, y esto le da la oportunidad de ajustar el concepto de acuerdo con su visión”. Los ajustes a la estrategia estadounidense “se corresponden en mucho con nuestro enfoque”, aseguró el portavoz de la Presidencia rusa, informa Efe: “Quizás se pueda esperar que esto sea al menos una modesta garantía de que podremos continuar de forma constructiva nuestro trabajo conjunto para encontrar una solución pacífica en Ucrania”.

“Pensaba que lo de Rusia y Ucrania iba a ser un poco más fácil, pero no está siendo nada fácil”, ha reconocido Trump este domingo: “Es una guerra muy dura, muy desagradable. El mes pasado murieron 27 000 personas, en su mayoría soldados”.

Mientras tanto, los líderes de Francia, Reino Unido, Alemania y Ucrania se reúnen este lunes en Londres con la idea de reforzar a Kiev ante Estados Unidos, de cara a una posible negociación con Rusia..

El objetivo es fijar “una posición euro-ucraniana” entre Macron; el primer ministro británico, Keir Starmer; el canciller alemán, Friedrich Merz, y el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, explicaron este domingo fuentes del Elíseo, informa Efe.

La principal cuestión crucial es la consolidación de la pérdida de territorio por parte de Ucrania, algo que parece pactado entre Washington y Moscú pero que Kiev no termina de aceptar. Y la otra cuestión clave en la ayuda a Ucrania, de la que los europeos ya son los principales proveedores, en particular en el terreno económico, es el uso que se hará de los bienes rusos congelados, sobre los que se está discutiendo en el interior de la Unión Europea (UE).