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ESPAÑA.– El Celta de Vigo protagonizó una de sus actuaciones más sólidas de la temporada y sorprendió al Real Madrid en pleno Santiago Bernabéu con una victoria 0-2, en una noche marcada por la contundencia gallega, las expulsiones merengues y un gol para enmarcar de Williot Swedberg.

El joven mediapunta sueco se adueñó del partido al firmar un doblete decisivo (54’ y 90+3’), destacando especialmente su primera anotación: un golazo de ‘taquito’ , lleno de técnica y atrevimiento, que dejó sin reacción a la defensa blanca y silenció a la afición madridista.

Pero la noche se complicó aún más para el Real Madrid. A la lesión de Éder Militao en el minuto 20 —quien volvió a encender las alarmas de la ya saturada enfermería madridista— se sumaron las expulsiones de Fran García

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