Decisiones personales del Ejecutivo están marcando la vida legal y la libertad de elección de millones.
Andrés Manuel López Obrador descubrió que su hijo menor consumía vapeadores.
En lugar de enfrentar este dilema familiar como millones de padres, decidió que si su hijo no podía vapear, ningún mexicano podría. Sin investigación científica rigurosa ni consulta pública, transformó la angustia doméstica en ley penal con penas de ocho años de prisión.
Un padre enfadado accedió a la maquinaria legislativa y criminalizó a ciudadanos adultos. Se construyó un discurso sobre "protección a menores" careciendo de fundamentación real. El vapeador fue equiparado con sustancias verdaderamente letales. Todo porque las neurosis privadas de los poderosos se convirtieron en obligaciones nacionales.
Cua

Expansión Política

Zona Franca Política y Sociedad
Proceso
El Diario NY Estados Unidos
Noticias de México
House Digest
Delaware Sports
Raw Story
America News