El día grande de las fiestas en honor a la Virgen de la Concepción volvió a convertir este lunes a Jinámar, en Telde , en un pequeño viaje al pasado. Muchos vecinos aprovecharon la jornada para rememorar cómo se celebraba antiguamente esta cita tan señalada, cuando las calles estaban repletas de puestos de caña de azúcar, las familias se reunían desde primera hora y una alegría compartida llenaba cada esquina del pueblo. Para los más veteranos, la procesión de este lunes poco se parece a aquellas celebraciones que marcaron la vida del barrio décadas atrás. Sin embargo, sí han perdurado los cantos que los vecinos entonaban a la virgen desde las azoteas que bordean la carretera general al verla pasar.

Adrián Cubas , desde minutos antes de que el reloj marcara las 13.00 horas,

See Full Page