Redacción.- El Manchester United encontró alivio en la Premier League gracias a un partido monumental de Bruno Fernandes, autor de dos goles y una asistencia en la victoria 4-1 sobre el Wolverhampton, último lugar de la tabla y único equipo que aún no conoce el triunfo tras 15 jornadas.

La victoria hizo escalar al conjunto de Rubén Amorim de la duodécima a la sexta posición, ahora con 25 puntos, mientras que los Wolves permanecen en caída libre: apenas dos unidades, tan solo ocho goles anotados y con un pie en el regreso al Championship.

Fernandes, líder absoluto del United

El United dominó el partido desde el arranque, aunque tardó en abrir el marcador por las intervenciones de Sam Johnstone, portero local que sostuvo a los Wolves en el primer tramo del encuentro. Su técnico, Robert Ed

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