Con la asistencia de más de setenta promotores voluntarios, Borruel celebró una posada navideña que sirvió como tapete de reconocimiento para quienes operan las Casas de Enlace en colonias y zonas rurales.

El evento, que contó con el respaldo en la esquina de Fernanda Martínez y Andre Soto, demostró que el trabajo en equipo es la mejor llave de aferrón para no soltar a la comunidad.

Desde el centro del ring, Borruel lanzó un mensaje directo al corazón de sus luchadores sociales.

"Abrir las puertas de su casa para convertirla en un espacio comunitario es un movimiento de alto impacto, equivalente a un plancha desde la tercera cuerda", expresó la regidora.

Reconoció que cada gestión resuelta y cada vecino canalizado no son simples caídas de dos, sino auténticos cambios de vida que merece

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