Su madre vive un estado de incredulidad y clama justicia, mientras el sospechoso, señalado por vecinos, fue retenido por la comunidad y posteriormente hallado muerto. Las autoridades investigan los hechos.

Liliana Ojeda, madre de la pequeña, aún no puede creer lo sucedido. Relató cómo perdió de vista a su hija mientras jugaban en casa:

“Estábamos jugando y, de repente, ella salió… no la vimos más”, explicó Ojeda. La madre, todavía en estado de shock , recuerda que la niña estaba a punto de graduarse , momentos que jamás pensó que se interrumpirían de forma trágica.

Su incredulidad y dolor se combinan con la impotencia de no entender cómo ocurrió un hecho tan atroz en su comunidad. Shelsy era una niña cariñosa, inteligente y obediente , y no era costumbre que se alejara de sus f

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