Fue difícil. De repente, un desasosiego comenzó a apoderarse del actor Daniel Day-Lewis, un reconocido cultor de la escuela de la actuación del método terminó por involucrarse tanto en el personaje del modisto Reynolds Woodcock, que ello lo terminó afectando. Así lo reconoció tras el estreno del filme El hilo fantasma, en 2017, que lo volvió a reunir con Paul Thomas Anderson, quien dirigió y escribió la película.

“Paul y yo nos reímos mucho antes de hacer la película. Y luego dejamos de reír porque nos embargó una profunda tristeza. Eso nos tomó por sorpresa: no nos dimos cuenta de lo que habíamos dado a luz. Fue difícil vivir con ello. Y todavía lo es”, dijo Day-Lewis al Telegraph. Y por eso, abrumado por la pena, tomó una decisión radical, dejar la actuación.

“Toda mi vida he dicho que

See Full Page