La superioridad de Marc Márquez a lo largo de la pasada temporada fue evidente e incuestionable: ganó 11 carreras y 14 esprints en los 18 grandes premios que disputó antes de sufrir una fractura en el hombro derecho que le dejó sin disputar las cuatro últimas citas del calendario pero ya proclamado campeón de MotoGP . Entre las pruebas de los sábados y de los domingos, o sea un total de 36 puestas en escena, solo en cuatro ocasiones terminó fuera del podio, lo que representa una regularidad contundente. Pero más sorprendente aún son las palabras de su jefe de mecánicos en Ducati, Marco Rigamonti, quien revela que pese al dominio proyectado, el nonacampeón mundial “no apretó al 100%” en diversas ocasiones . Es decir, nadie conoce los límites de Marc Márquez al manillar de la

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