La provincia de Santa Cruz inició el primer día de diciembre, de manera formal, una nueva etapa de su historia hidrocarburífera. Tras el retiro de YPF del flanco norte, siete compañías -la mayoría Pymes con capital y trayectoria regional- tomaron posesión de las diez áreas que la petrolera estatal devolvió a la administración provincial. El ministro de Energía y Minería, Jaime Álvarez, definió el momento como “el verdadero inicio del cambio”, marcado por el traspaso operativo, el reordenamiento del personal y el comienzo de un ambicioso plan de remediación ambiental.

La transición formal comenzó el lunes 1 de diciembre a las 7 de la mañana, cuando las nuevas operadoras asumieron la concesión, operación y mantenimiento de los yacimientos. Según Álvarez, el proceso incluyó mediciones de sto

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