La presidenta modificará el decreto para evitar más saturación náutica

Las aguas de Baleares no se convertirán en un mercado libre de embarcaciones privadas convertidas en negocios turísticos. La presidenta Margalida Prohens lo dejó claro durante una sesión extraordinaria de la Mesa Náutica celebrada en el Club Náutico S’Arenal: “En las Illes Balears, el alquiler turístico de embarcaciones privadas no tendrá cabida”.

La respuesta del ejecutivo autonómico llega apenas días después de que el Boletín Oficial del Estado publicara una resolución que permite a las embarcaciones de recreo privadas operar comercialmente durante tres meses al año mediante un simple cambio temporal de uso. Una medida que entrará en vigor el 15 de agosto pero que no podrá aplicarse en el archipiélago balear.

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