El acuerdo, que se extenderá hasta el año 2033, fue confirmado por la compañía surcoreana este lunes, aunque sin mencionar directamente a Tesla, a la que describió como una "importante empresa global" en un comunicado oficial.
Según Musk, la nueva planta de Samsung ubicada en Texas, Estados Unidos, será la encargada de fabricar estos chips de alto rendimiento, que estarán destinados a mejorar el desempeño y la autonomía de los vehículos eléctricos de Tesla mediante tecnología de inteligencia artificial.
Samsung Electronics, la principal firma del mayor conglomerado industrial de Corea del Sur, atraviesa actualmente un periodo difícil en su división de semiconductores. A inicios de julio, la compañía anticipó una caída del 56% en su beneficio operativo anual, derivado de una desaceleració