El polémico lanzamiento que vive estos días la ciudad de Nueva York reaviva la búsqueda del helado más extravagante (y delicioso) de cada verano
Cualquier seguidor de la serie Friends recordará el capítulo en el que Ross y Rachel se escandalizan cuando Phoebe prueba en su brazo la leche materna que alimenta a Ben. El grito de asombro se repite cuando Joey cata también el biberón. “¿Nunca has probado la leche que toma tu hijo Ben?”, espeta Phoebe con gran sorpresa a Ross. “Es leche materna por favor, algo repugnante y no es para adultos”, se defiende el padre. Este comentario de ficción podría ser el más generalizado entre la población adulta cuando alguien pregunta si probaría este alimento, el primero que la mayoría paladea al nacer y que la OMS defiende tomar en exclusividad hasta lo