Cuando la temperatura corporal aumenta de forma rápida y el cuerpo no logra regularla adecuadamente, pueden resultar gravemente dañados órganos vitales, un fenómeno que se da en verano y que afecta a niños y adultos mayores
Con la llegada del verano, los golpes de calor se han convertido en un problema creciente de salud pública. Solo entre mayo y julio, se han registrado 1.180 muertes atribuibles a las altas temperaturas, según datos del Ministerio de Sanidad . La cifra representa un aumento de más del 900% en comparación al mismo periodo de 2024, en el que se registraron 114 fallecimientos.
Aunque el golpe de calor no es una enfermedad en sí misma, sus síntomas pueden ser graves, especialmente a nivel neurológico, por lo que requieren atención inmediata. Se trata de una condición méd