Londres, 9 ago (EFE).- Con la llegada de Benjamin Sesko a Old Trafford, el Manchester United se ha gastado este verano 240 millones de euros en cuatro futbolistas. Este desembolso contrasta con las 450 personas que perdieron su empleo la temporada pasada por los agresivos recortes del club y con las declaraciones de uno de sus dueños, Jim Ratcliffe, que aseguró que sin estas medidas se hubieran quedado sin dinero en navidades.
Desde la llegada de Ratcliffe y su empresa INEOS en diciembre de 2023, el Manchester United ha seguido una política de racionamiento para cuadrar unas cuentas que arrojaban pérdidas de 313 millones de libras (360 millones de euros) en los últimos tres años y que sólo podían ir a peor con la no clasificación a Europa de esta temporada y el sonrojante decimoquinto pue