Es muy cierto que las elecciones mexicanas son muy caras y los partidos políticos gastan, incluso derrochan, dinero subsidiado, pero otra cosa es eliminar de tajo el financiamiento público a ellos y sin una propuesta bien definida que releve los dineros que otorga el INE.
Si la reforma electoral que propone Claudia Sheinbaum pretende eliminar el subsidio a los partidos y eliminar las curules plurinominales no es tan sólo una contradicción de lo que la izquierda, incluyendo a Morena, defendió cuando era Oposición, sino revela que, para el partido que fundó López Obrador, los diputados de minoría no son un principio de pluralidad democrática, sino que fue, simplemente, una táctica política que se ignora una vez estando en el poder.
Es muy cierto que las elecciones mexicanas son muy caras y