Abanico
Las letras quedaron sin alma, personalidad ni autenticidad. No es un veredicto fatalista e infundado, es lo que encontramos en Internet, en la voz de las marcas, en la estropeada carrera de los influencers de cartón.
Cada vez encontramos más contenido masivo pero superficial, donde el 89 % de los textos profesionales siguen las mismas plantillas genéricas. Hoy este contenido automatizado inunda internet con textos superficiales y sin alma.
Hoy las publicaciones corporativas repiten fórmulas vacías, los newsletters reciclan consejos genéricos y las "historias de éxito" suenan fabricadas en serie.
¿Cómo encontramos este contenido "degradado"? Las pistas son claras: iniciar con frases motivacionales genéricas, enlistar consejos obvios sin contexto real, carencia de experiencias pe