En junio, en Arlington, Virginia, cuatro ejecutivos de Meta, OpenAI y Palantir fueron nombrados tenientes coroneles e integrados en el Destacamento 201. Esta nueva Unidad de Innovación Técnica del Ejército tiene por misión asesorar a las fuerzas armadas en tecnologías con potencial bélico, marcando una colaboración directa entre el poder tecnológico y militar.
Este hito representa un . Empresas que en el pasado evitaban la implicación bélica, bajo lemas como "conectar el mundo", ahora se sumergen en la defensa.
Este giro se alinea con una transformación económica: la inversión de capital riesgo en compañías vinculadas a la defensa creció un 33 por ciento el último año, hasta los 31.000 millones de dólares, según McKinsey. Firmas como Andreessen Horowitz ya destinan cientos de millones