El pasado viernes a las nueve y cuarto de la noche Córdoba se estremecía preocupada al observar llamas en el edificio que compendia siglos de historia y de cultura de la ciudad y también de la humanidad. El trabajo sobresaliente de los bomberos y el plan de contingencia impidieron un drama mayor.
Es tiempo ahora de esclarecer dudas y de recuperar la normalidad. La UNESCO ha solicitado al Ministerio de Cultura un informe detallado y su directora general, Audrey Azoulay, expresó en la red social X su gratitud hacia bomberos y autoridades locales de Córdoba por la “rápida actuación” que permitió que los daños provocados por el incendio en la Mezquita-Catedral de la Ciudad, Patrimonio Mundial de la Humanidad, fueran menores. El Ayuntamiento de Córdoba, por medio de su alcalde, mostró e