Uno de los principales retos a los que se enfrenta la humanidad en la época moderna surge de la complejidad de diseñar, integrar y operar tanto eficiente como efectivamente un modelo económico que permita satisfacer las necesidades de la humanidad sin comprometer el delicado balance del medio ambiente, además de promover un balance adecuado entre distintos sectores sociales.
Algunas de las propuestas de mayor peso están descritas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) propuestos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), como un conjunto de metas globales que buscan resolver aquellos grandes desafíos que enfrentamos como humanidad mediante una propuesta de convergencia que permita integrar tres elementos en una agenda de desarrollo global: económico, social y medioambienta