Complementar el tratamiento habitual con un inhibidor de un gen concreto potencia el efecto de la terapia contra el cáncer de pulmón más agresivo. Es la conclusión de un estudio multicéntrico liderado por el hospital del Mar, en Barcelona, que prepara el terreno para un nuevo abordaje de la enfermedad.
El trabajo, publicado en Cells Report Medicine , analiza el efecto de inhibir MET en modelos de ratón, así como la expresión de este gen en pacientes con cáncer de pulmón de célula pequeña, que representa el 15% de los casos de tumores pulmonares y es el que presenta peor pronóstico. Su progresión es muy rápida y la supervivencia a tres años es del 15%, ya que el diagnóstico suele ser tardío, cuando ya no existe la posibilidad de un abordaje quirúrgico. La mayor parte de los casos corresp