La Casa Blanca informó este 12 de agosto que, en los primeros seis meses desde el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, han sido detenidos más de 300 mil migrantes indocumentados. De acuerdo con la portavoz Karoline Leavitt, casi el 70% de ellos son extranjeros con antecedentes penales o condenas previas, aunque estos datos no han sido verificados de manera independiente.

Leavitt calificó la cifra como “un éxito en toda regla”, argumentando que las detenciones eliminan amenazas para la seguridad pública y devuelven a estas personas a sus países de origen. La funcionaria destacó que la estrategia forma parte de la histórica campaña de deportación masiva prometida por Trump durante su campaña electoral.

Desde enero, el Gobierno republicano ha reforzado las operaciones

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