Una hora y media después del partido, los hinchas de Racing no podían dejar el estadio Campeón del Siglo . La derrota se había consumado dos horas antes, ya no había un solo fanático de Peñarol y solo se escuchaban los murmullos de la frustración por un partido que dejó incertidumbre, especialmente por el rendimiento. Sin embargo, la Policía no dejaba salir a los argentinos, que vivieron un auténtico calvario para poder volver a casa.
Los testimonios se replicaron en las redes sociales, el canal que eligieron muchos de los hinchas que cruzaron el Río de La Plata para exponer el maltrato . Los dirigentes y el plantel permanecieron en la cancha hasta que se fue el último hincha. Como consecuencia de esta situación, la delegación celeste y blanca recién pudo aterrizar este miércole