A pesar del conflicto salarial que mantienen sus profesionales, el Hospital Garrahan conserva su capacidad para llevar adelante intervenciones muy complejas. Así ocurrió a principios de agosto, cuando unas siamesas rosarinas fueron separadas mediante una cirugía posterior al nacimiento. La evolución tras el procedimiento fue favorable y quedaron internadas en Buenos Aires.
Si bien existen varios antecedentes en el nosocomio porteño, las cirugías de gemelos unidos no son frecuentes. En esta oportunidad, la operación permitió cortar el hígado de manera que ambas bebas puedan conservar todas sus funciones vitales.
El coordinador general de servicios quirúrgicos del centro de salud pública, Marcelo Boglione , confirmó que la glándula "se pudo separar exitosamente". Las nenas ti