La Federación Andaluza de Fútbol ejecuta un plan para que futbolistas amateurs y otros jóvenes en Centros de Internamiento se rehabiliten de sus castigos mediante el arbitraje

“He aprendido a respetar las decisiones de los árbitros y al equipo contrario. Y he entendido que los impulsos, a veces, son malos”, aclara Julio García González, futbolista del Fútbol Base Carmona de 16 años protagonista de un proyecto pionero de la Federación Andaluza de Fútbol. Esos malditos impulsos de los que habla le llevaron a agredir a un árbitro en un encuentro de su equipo. Con tan solo 14 años, a Julio le cayó una sanción de 41 partidos. Un castigo severo, puesto que el colegiado presentó un parte de lesiones e incluso el asunto llegó a la fiscalía de menores, al encontrarse ya el chico en edad de respons

See Full Page