Hace exactamente cuatro años, el 15 de agosto de 2021, los talibanes iniciaron en Afganistán su funesta campaña para borrar a las mujeres del espacio público. Desde que tomaron el poder, han promulgado más de 70 decretos que vulneran los derechos de las niñas y las mujeres, en particular su derecho a la educación.
Hoy, Afganistán ostenta el triste récord de ser el único país del mundo donde la enseñanza secundaria y superior está estrictamente prohibida a niñas y mujeres. Como consecuencia de esta decisión retrógrada, cerca de 2,2 millones de ellas se encuentran privadas de educación más allá de la primaria.
En el ámbito periodístico, las mujeres afganas también están siendo progresivamente silenciadas. La denominada “Ley para la promoción de la virtud y la prevención del vicio” , int