Este jueves se cerraron los partidos de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores. Uno de los candidatos saltó a escena y no respondió a su chapa de favorito. En Asunción, River Plate igualó sin goles en su visita a Libertad.
Una buena para Marcelo Gallardo fue que pudo contar con Paulo Díaz. El zaguero chileno superó una inflamación en la rodilla izquierda, que lo dejó al margen del cotejo ante Independiente del fin de semana, y retomó su lugar en la defensa. Era urgente la vuelta de Díaz en el equipo, por la ausencia de Lucas Martínez Quarta y Germán Pezzella. Este último se rompió los ligamentos.
River tuvo dos tiempos muy distintos ante el Gumarelo. En el primer periodo, dejó un rostro demasiado pálido, sin conexiones, muy lejano a la idea que intenta plasmar Gallardo. De