El bistec de res, uno de los alimentos más comunes, se ha convertido en un lujo, durante 2025, su precio se disparó 18% en comparación con el año anterior, provocando que millones de familias en pobreza lo dejen fuera del menú.
La carne molida de res también encareció 16.6%, y la leche pasteurizada 8.3%, afectando directamente la dieta de quienes ya destinan la mayor parte de su ingreso a la comida.
El impacto se siente en todo el país, pero golpea con más fuerza a los 12.8 millones de hogares —33.1% del total— que el Inegi identifica con algún grado de inseguridad alimentaria. Aunque esta cifra es menor a la de 2022, uno de cada tres hogares sigue sin poder garantizar una alimentación adecuada. En zonas urbanas, el costo mensual por persona de la canasta alimentaria llegó a 2 mil 453 pe