Calanda vive desde hace meses una sucesión de robos de cableado de cobre que está afectando a su alumbrado público, a edificios municipales y a infraestructuras privadas. El Ayuntamiento de esta localidad cifra en 120.000 euros el coste acumulado de los destrozos, una cantidad que, según sus cálculos, equivale a unos 120 euros por cada familia del municipio, actualmente. La situación ha generado cortes de luz, reparaciones de urgencia y el desvío de recursos municipales para reponer el material sustraído, mientras se mantiene la investigación de la Guardia Civil.
Actividad continuada
El alcalde, Alberto Herrero, explicó que los robos comenzaron hace tres o cuatro meses y que el presunto autor es un vecino “muy localizado” que ya fue detenido y puesto en libertad provisional. Desde entonc