En 2018, Andrés Manuel López Obrador asumió la Presidencia de la República con una estrategia enfocada en combatir la corrupción en todos los niveles de la administración pública federal. Como parte de esa meta, modificó el modelo de adquisición de medicamentos que venía operando desde años atrás y retiró al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) la responsabilidad directa de realizar esas compras. A partir de ese momento, la adquisición de insumos médicos quedó bajo control de la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con el argumento de reducir costos y eliminar posibles prácticas irregulares detectadas en sexenios anteriores.

Según Oliver Meza, académico del Tecnológico de Monterrey, esta decisión derivó en un cambio institucional que el Gobierno

See Full Page