Desde 1970, la Agencia de Protección Ambiental (EPA) ha regulado las emisiones de gases contaminantes a través de la Ley de Aire Limpio. En 2009, la EPA determinó que los gases de efecto invernadero son peligrosos para la salud y el clima, estableciendo normas para vehículos, industrias y plantas eléctricas. Sin embargo, la administración Trump ha propuesto revocar estas reglas, lo que preocupa a científicos y activistas.
Diane Pataki, científica de la National Wildlife Federation, señaló en entrevista con Clic Verde de NTN24 que la eliminación de estas normativas podría aumentar las emisiones de CO2 y empeorar los efectos del cambio climático, como las olas de calor y el aumento de enfermedades respiratorias. "Estas normas son esenciales para proteger la salud humana y el medio ambient