La papa es uno de los alimentos básicos del mundo. Se cultivó por primera vez hace miles de años en la región andina de Sudamérica y se extendió por todo el mundo a partir del siglo XVI. Pero, a pesar de su importancia para la humanidad, sus orígenes evolutivos seguían siendo un enigma, hasta ahora.
Un nuevo análisis de 450 genomas de papas cultivadas y 56 genomas de especies de papas silvestres ha revelado que el linaje de la papa se originó a través del mestizaje natural entre una planta silvestre de tomate y una especie parecida a la papa en Sudamérica hace unos 9 millones de años.
La hibridación dio lugar a la aparición del tubérculo de la papa naciente, una estructura agrandada que alberga nutrientes bajo tierra, según los investigadores, que también identificaron dos genes cruciale