El mapa de México no será siempre como lo conocemos. La Península de Baja California , con su desierto, mares turquesa y cordilleras rocosas, está emprendiendo un viaje silencioso hacia el norte. Avanza apenas unos centímetros cada año, pero su destino final es claro: convertirse en una Isla .
La ciencia explica lo que a simple vista parece inmutable. De acuerdo con geólogos de la UNAM , este fragmento de tierra pertenece a la Placa del Pacífico , que se desliza lentamente en dirección opuesta a la Placa Norteamericana . La línea de fractura que las divide es la famosa Falla de San Andrés , un sistema geológico capaz de provocar sismos devastadores, pero también de redibujar los límites del planeta.
El movimiento es tan pausado que resulta difícil imaginarlo. Desde que Hern