El día en que Trump fue elegido para su primer mandato, en noviembre del 2016, en el Parlamento ruso descorcharon botellas de champán y hombres relevantes del entorno de Putin, como Serguéi Markov y Dmitri Peskov, elogiaron al ganador. Según escribe Catherine Belton en el libro Los hombres de Putin , Trump había viajado en 1987 a Moscú y quedó impresionado por la arquitectura de la ciudad y por las jóvenes eslavas. En los noventa frecuentó a agentes del KGB, magnates y miembros del crimen organizado próximos al Kremlin, que le sacaron de algún apuro económico.

El desenlace de la reunión de Alaska justifica la euforia que sintieron los políticos rusos el día que Trump fue elegido presidente. Satisface incluso a los conspiracionistas, que afirman que en algún momento de su vida Trump ha t

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