La singladura de Screamin´ Jay Hawkins da para una película o una serie, tanto en lo personal como en su vida artística, marcada por la provocación, un único éxito global en los años 50, el desdén de las discográficas y un carácter pionero en el uso de triquiñuelas escénicas y teatrales –el humo, los ataúdes, la imagen de hechicero vudú...– que influyó a múltiples músicos y bandas posteriores . Precisamente su único himno, I Put a Spell on You (Liburuak), es el título de la biografía escrita por Steve Bergsman sobre el músico y el hombre, un tipo tan simpático como fabulador, pendenciero y peligroso para el sexo femenino.
El subtítulo del libro traducido por Carmen Espina Flórez, La extraña vida de Screamin’ Jay Hawkins, se ajusta como un guante a la trayectoria personal y artíst