Está siendo un verano para cagarse. Cada dos por tres tropezamos con la noticia de una nueva piscina pública que ha tenido que ser cerrada porque se han encontrado en el agua excrementos flotantes, en lo que parece ser una nueva moda juvenil , que ya son modas. En tiempos, la moda juvenil era enamorarse de los maniquís o de ti, así lo aseguraba Radio Futura, hoy es ir de cuerpo en una piscina pública, como un hipopótamo en el Nilo. Ya se ve que la sociedad sigue avanzando.
Por si eso no fuese suficiente porquería, al futbolista Calderón no le ficha el Nàstic porque hace un tiempo se cagó “ en los muertos de todos los catalanes ”, que ya son ganas de cagarse. Una mierda de verano, en suma.
Hay futbolistas que, eufóricos ante la victoria, les da por bailar , por marcarse unos pases