A menudo escuchamos que el 75% del planeta está cubierto de agua, lo que nos brinda la falsa ilusión de que nunca habrá problemas de suministro. Pero la realidad es es apta para que podamos beberla. Y la estamos perdiendo.
Dicho en pocas palabras, en todo el mundo, el agua dulce está desapareciendo, y un nuevo estudio, , concluye que gran parte de ella está llegando al océano. La desecación de los continentes contribuye aún más al alarmante aumento del nivel del mar global que el derretimiento de las capas de hielo.
Los autores del estudio, liderado por Hrishikesh Chandanpurkar, concluyen que se requieren medidas urgentes para prepararse para tiempos mucho más secos que se avecinan, debido al cambio climático y al agotamiento de las aguas subterráneas por la acción humana.
Utilizand