La frontera entre Perú y Colombia ha sido escenario de un creciente conflicto en los últimos días. En el distrito peruano de Santa Rosa, ubicado en la Isla Chineria, se han registrado incidentes que han puesto en tela de juicio la soberanía territorial. Recientemente, un avión militar colombiano violó el espacio aéreo peruano y el precandidato presidencial colombiano, Daniel Quintero, izó la bandera de su país en territorio peruano, lo que ha generado tensiones diplomáticas.

En este contexto, la Policía Nacional del Perú (PNP) detuvo a dos topógrafos colombianos, John Willington Amias López y Carlos Fernando Sánchez Ortegón, quienes realizaban mediciones topográficas con equipos de georreferenciación satelital (GPS) en Santa Rosa, aparentemente sin los permisos necesarios. Ambos, originarios de Bogotá y Leticia, trabajaban para una empresa constructora. A pesar de que argumentaron desconocer la obligación de tramitar autorizaciones, la Fiscalía investiga si su actividad tenía fines no autorizados.

El Poder Judicial ha dictado una detención preliminar de siete días contra los topógrafos, quienes son investigados por el presunto delito de atentado contra la integridad nacional, según el artículo 325 del Código Penal peruano, que contempla penas de hasta 15 años de prisión. La resolución judicial señala que el hallazgo de una bandera colombiana y las actividades realizadas en la zona podrían interpretarse como acciones que afectan la soberanía de Perú. Además, se consideró que los detenidos podrían huir de la justicia o interferir en la investigación.

Durante la audiencia, Carlos Fernando Sánchez se disculpó ante la población peruana y negó cualquier vínculo político, así como su relación con el precandidato Quintero. Tras permanecer bajo custodia en la comisaría de Santa Rosa, los topógrafos fueron trasladados a Caballococha, donde continuarán las diligencias fiscales. El fiscal Rodolfo Sifuentes explicó que este traslado era necesario debido a la falta de ingenieros en Santa Rosa para analizar los equipos incautados.

Los detenidos permanecerán en Caballococha hasta el 19 de agosto, fecha en la que vencerá la medida preliminar. En este lugar, la Fiscalía de la Nación supervisará la revisión técnica de los equipos para determinar si los datos recolectados tenían fines estratégicos. Familiares de los detenidos han defendido su inocencia, afirmando que uno de ellos solo actuaba como ayudante y no tenía conocimiento sobre permisos migratorios.

La detención de los topógrafos se produce en un contexto de tensión diplomática entre Perú y Colombia, en una zona de libre circulación para residentes, pero que no exime del cumplimiento de normas migratorias ni de autorizaciones especiales para actividades técnicas.