A menos de dos horas del Obelisco , en el corazón de Victoria , se levanta un palacio que parece transportarte directo a la Belle Époque : el Palacio Sans Souci .

Se trata de uno de esos lugares que sorprenden incluso a quienes creen conocer todos los secretos de la provincia. Su fachada de inspiración francesa, los amplios jardines y los detalles de época lo convierten en un escenario ideal para una escapada romántica.

Construido en 1918 y diseñado por el arquitecto francés René Sergent , este imponente edificio fue pensado como residencia de la familia de Carlos María de Alvear. Con el paso del tiempo, fue testigo de reuniones sociales, producciones cinematográficas y eventos de todo tipo, hasta convertirse en el espacio de ensueño que es hoy.

Cada rincón del palacio

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