Por entonces los vecinos impedían el paso de vehículos de la Comisión Nacional de Energía Atómica por la ruta 38, con el objeto de manifestar su intención de evitar que se pusiera en marcha la extracción de uranio en el denominado Cordón del Velazco, que rodea la ciudad capital de la provincia.
En 2012, las masivas marchas y protestas contra la minería del uranio en La Rioja, impulsaron la promulgación de la Ordenanza Municipal N.º 4930, que declaró el departamento Capital "Zona No Nuclear", y prohibió el cateo, la prospección, exploración, explotación o industrialización del uranio o cualquier otra sustancia radiactiva.
A fines de 2013, las localidades ubicadas en la Quebrada Alipán sufrieron una crisis hídrica. La Asamblea Riojana Capital registró, mediante fotografías y videos, el uso