En medio de la grave oleada de incendios forestales que asola Castilla y León, con miles de hectáreas calcinadas, pueblos evacuados y un patrimonio natural en jaque, surge una voz de alarma desde el corazón mismo del operativo de extinción. Las cuadrillas de especialistas en la lucha contra incendios forestales ( ELIF ), consideradas un cuerpo de élite por su alta cualificación y capacidad de respuesta, han mostrado su "profunda preocupación y malestar ante la situación actual ". El motivo de su queja es tan directo como alarmante: denuncian que muchas de sus dotaciones permanecen "paradas" en las bases, sin ser movilizadas, en un momento en que la Comunidad más las necesita.
La denuncia, recogida en un comunicado emitido por los propios trabajadores, pone de manifiesto una situació