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CINCINNATI, ESTADOS UNIDOS.- Bajo un sol implacable y en condiciones que exigieron al máximo a los jugadores, Carlos Alcaraz se alzó como nuevo campeón del Masters 1000 de Cincinnati, luego de que su rival en la final, Jannik Sinner, tuviera que retirarse a causa de una fiebre que le impidió competir al nivel esperado.

La esperada batalla entre dos de los mejores tenistas del mundo se vio marcada por la adversidad que sufrió el italiano, quien no pudo hacer frente a las altas temperaturas y a su malestar físico, que terminó por desgastarlo desde el inicio del partido. Sinner abandonó la contienda cuando el marcador reflejaba un contundente 5-0 a favor de Alcaraz en el primer set, dejando el título en manos del número uno del mundo.

Un dominio absoluto de Alcaraz ante un Sinner d

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