Paulo Dybala está, desde hace varios meses, en la cabeza de todos los hinchas de Boca. Desde que se concretara la llegada de su amigo Leandro Paredes, la gente del Xeneize sueña con traer a la Joya.
Su ex compañero en Roma, club en el que todavía no renovó su contrato, siempre intenta convencerlo de venir a jugar con él con la camiseta azul y oro: "Me encantaría que juegue en Boca por la clase de jugador y de persona que es, porque sé que para él también sería un sueño, pero obviamente no me meto en las decisiones de los demás, cada uno tiene su carrera, su vida. Si le tocara venir, bienvenido sea".
Su mujer Oriana Sabatini fue consultada sobre la eventual llegada de Dybala a Boca y respondió respecto de su rol en la decisión: "No depende de mí; primero tienen que llamarlo".
La parti